17 nov 2008
No hacer nada
Estoy viendo una charla de La Serrada sobre educación libre en la que responsables de la Escola Lliure "Els Donyets" están explicando su visión sobre la educación y su manera de funcionar y he tenido que detener el DVD un momento para transcribir lo siguiente:
Tenemos un tiempo para los niños que es mío e intransferible en el que puedo estar haciendo cosas... o puedo no hacer nada. Porque puedo no hacer nada, y no hacer nada también es muy importante.
A cuantos nos cuesta 'no hacer nada', qué difícil es 'no hacer nada'... "no, es que no voy a hacer nada"... Ostras! no hacemos nada ahora, ¿y qué? ¿cómo nos sentimos cuando no hacemos nada?
Cuando estamos en una situación de estrés bestial, de agobio de trabajo, de... de repente te dicen: "ahora no hagas nada". Es como una desituación total, no encontrarte contigo mismo no saber lo que quieres, lo que te apetece.
Pues bien, los niños saben 'no hacer nada'. De hecho es una de las cosas más difíciles cuando entra un educador nuevo, el hecho de 'no hacer nada', esperar, no hacer, porque a partir de no hacer salen muchas cosas.
Todos tenemos derecho a no hacer nada, a estar tranquilos, y estar tranquilo mirando el cielo, los pinos es igual de importante que hacer ecuaciones, porque estoy aprendiendo a estar conmigo mismo, sintiéndome a mí y yo soy mucho más importante que unas ecuaciones.
¿Qué os parece?
Por genética (mi madre ya cuenta que ni en la barriga me movía) y por decisión propia e incluso por incapacidad de liarme mucho, soy una persona bastante slow. Vamos, que está claro que de un infarto por estrés no me voy a morir.
Pues aún siendo así, no sé 'no hacer nada'. De hecho, mientras veo esta charla en la tele tengo el portátil entre las piernas mirando correos y estoy masticando tostadas con mermelada (qué de mermelada como, eh?). Es decir, ¿por qué no disfrutar de la charla en DVD sin distracciones internetísticas? ¿por qué sentarme a escuchar música me parece una pérdida de tiempo y se ha convertido en actividad de reparto (secundaria) de acompañamiento de la conducción, del footing o del gimnasio?
Pues porque si no hacemos nada nos sentimos mal. Si no estamos haciendo algo productivo nos autojuzgamos definiéndonos como vagos, y uhhh! yo no puedo ser un vago, qué pensarán los demás.
Pues ale! a vivir la vida, a disfrutar del tiempo libre, a 'no hacer nada' y a aprovechar ese momento de no hacer nada para lo que quieras. Piensa cómo puedes ser feliz, piensa cómo puedes hacer felices a los demás, piensa...
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2 comentarios:
Totalmente deacuerdo Armandilio. Comparto el movimiento 'Slow' al 100 %. Creo firmemente que cuando muera (y creo poder decir que de infarto de miocardio tampoco será aunque por si acaso lagarto lagarto ) no echaré de menos las horas trabajadas, sino las horas que no dediqué a la gente y a lo que de verdad me importa. El que crea que las personas sólo SON por el hecho de producir o consumir, allá él.
Un saludo.
Mónica.
Otra fan del movimiento Slow. Qué bien me hizo leer el libro! No es que yo haya tenido problemas de conciencia para no hacer nada, pero vaya, desde que soy madre, reconozco que me he pasado bastantes días sin hacer nada más que mirar a mi hija, embelesada.
Y, bueno, ahora ya no tanto, pero soy de las que, de joven, cuando no tenía nada que hacer, pues hacía justamente eso: nada. Me tumbaba en la cama, me ponía música, y que pasaran las horas. Aiiins, qué tiempos aquellos!!
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